Cufea Bonsai (Cuphea hyssopifolia)
Nombre científico: Cuphea hyssopifolia.
Nombre común: Cufea, falsa brecina.
Origen: México, Guatemala Y Honduras.
Características: Aunque en su estado natural puede llegar a alcanzar alturas de hasta 1 metro, cuando se cultiva como bonsái, su tamaño se mantiene más pequeño, generalmente entre 30 cm y 60 cm, dependiendo de la técnica de cultivo.
La corteza del tronco es bastante delgada y, aunque puede ser no muy prominente, puede volverse levemente rugosa a medida que el árbol envejece.
El tronco tiende a ser recto, pero se puede modelar a través de técnicas de alambrado y poda, permitiendo crear formas atractivas y estilizadas que caracterizan a los bonsáis.
Las hojas son pequeñas, generalmente de entre 2 a 5 cm de longitud. Tienen una forma ovalada a lanceolada, con bordes lisos. Su disposición es opuesta a lo largo de las ramas, lo que ayuda a crear un follaje denso. Su color es de un verde brillante, lo que complementa las coloridas flores de la planta. El color se vuelve más intenso en condiciones ideales de luz.
La superficie de las hojas es suave y tiene un acabado ligeramente brillante, lo que aumenta su atractivo visual.
Se caracteriza por un crecimiento denso y compacto. Su follaje espeso le da un aspecto exuberante, ideal para formar bonsáis que se destacan en colecciones.
Una de las características más atractivas de esta especie son sus flores. Produce pequeñas flores tubular, generalmente de color púrpura o lavanda, que aparecen durante gran parte del año en climas cálidos. Las flores son muy abundantes y contribuyen a su nombre de «mil colores» debido a su capacidad de florecer en diferentes tonos.
Después de la floración, se forman frutos pequeños, similares a cápsulas, que son menos ornamentales pero también interesantes.
Cultivo: La Cuphea es un arbusto perenne de origen tropical y subtropical. Esto quiere decir que no tolera picos de calor, frío ni heladas continuas. Vive muy bien en el interior de casa porque las temperaturas son estables. Conviene colocarla cerca de una ventana grande donde reciba la mayor cantidad de luz solar.
Al igual que con otros bonsáis de interior, abonaremos durante dos periodos bien definidos: El primer periodo va desde principios de primavera hasta el pico de calor del verano (cuando la temperatura supera los 35°C). Utilizaremos un abono de crecimiento (rico en nitrógeno). Este nitrógeno (N) será superior al fósforo (P) y al potasio (K). Puede ser químico u orgánico, sólido o líquido.
Durante el periodo más caluroso del verano (por encima de 35ºC) no es necesario poner ningún abono, porque el árbol está en letargo y no lo asimilaría.
El segundo periodo va desde las temperaturas más bajas del verano hasta finales del otoño. Debemos utilizar un fertilizante que contenga más fósforo (P) y potasio (K) que nitrógeno (N). Puede ser químico u orgánico, sólido o líquido.
En invierno no fertilizaremos.
Debemos trasplantarlo cada 2 años, ya que el crecimiento de estas raíces es rápido. La mejor época para hacerlo es a principios de primavera. Este bonsái necesita que todo el agua de riego gotee, por lo que puedes utilizar Terrabonsai como sustrato o si lo prefieres Akadama con gravilla.
Se puede alambrar en cualquier época del año. Es necesario recordar que en primavera las ramas estarán más flexibles. Hay quien dice que al ser un arbusto no puedes alambrarse, pero si una rama no está donde se necesita, se puede enderezar con un alambre fino adaptado a la resistencia de la rama para colocarla en el lugar deseado.
Para que sus atractivas flores duren más, hay que tener cuidado de no mojarlas al regarlas. No usar abono foliar y asegurarse de que reciban mucha luz.
Exposición: Pleno sol.
Usos: Se ha ganado su popularidad como bonsái en muchas regiones, especialmente por su atractivo follaje y coloridas flores.