Candelabro africano (Euphorbia candelabrum)
Nombre científico: Euphorbia candelabrum.
Nombre común: Euforbia Candelabro, Candelabro Africano.
Origen: Endémica del Cuerno de África.
Características: Suculenta arbórea que se caracteriza por su distintiva forma de candelabro y su crecimiento vertical. Puede alcanzar alturas de hasta 5 a 7 metros en su hábitat natural, aunque en cultivo puede ser más pequeña. Tiene un tronco grueso y acantosos que se ramifican en varias columnas verticales, creando una apariencia arqueada que recuerda a un candelabro.
Las ramas son carnosas y presentan una coloración verde brillante. Cada rama tiene costillas pronunciadas y pequeñas espinas en los bordes. Estas espinas ayudan a proteger la planta de herbívoros.
Produce pequeñas flores que suelen ser de un color amarillo o verde, agrupadas en inflorescencias que emergen en la parte superior de las ramas. Aunque las flores no son particularmente llamativas, añaden un aspecto ornamental a la planta.
Cultivo: Prefiere pleno sol para un crecimiento óptimo. La exposición a la luz solar intensa promueve el desarrollo de un color verde vibrante y una forma compacta.
Necesita un sustrato bien drenado. Funciona mejor en una mezcla específico para cactus que sea arenosa y permita el rápido drenaje de agua.
Es altamente tolerante a la sequía. Regar moderadamente, permitiendo que el suelo se seque completamente entre riegos. Durante el invierno, reducir drásticamente el riego, ya que la planta entra en un período de inactividad.
No requiere fertilización frecuentemente, aunque se puede aplicar un fertilizante diluido para suculentas durante la temporada de crecimiento (primavera y verano) para fomentar un crecimiento saludable.
Generalmente no necesita poda a menos que se quiera dar forma a la planta o eliminar ramas muertas. Hay que tener en cuenta que el látex lechoso que exuda al ser cortada es irritante, por lo que es recomendable usar guantes.
Se puede propagar fácilmente mediante esquejes. Es importante permitir que los esquejes se sequen y cicatricen antes de plantarlos para evitar problemas de pudrición.
Exposición: Pleno sol.
Usos: Ideal para jardines de bajo mantenimiento gracias a su resistencia a la sequía, es perfecta para climas cálidos y secos.
Su porte vertical y escultórico la convierte en una planta destacada en jardines grandes, donde puede actuar como un imponente punto focal.
Funciona bien en arreglos con otras suculentas y cactus, aportando una variabilidad de altura y textura al diseño.
Se puede cultivar en grandes macetas o contenedores decorativos, lo que permite su uso en patios y entradas soleadas.
Toxicidad: Todas las partes de esta planta son tóxicas por ingestión, tanto en humanos como en perros y gatos. El contacto con la savia lechosa del látex puede causar irritación de la piel. Hay que aumentar siempre la precaución manteniendo siempre vigilados a niños pequeños y a las mascotas cuando estén cerca de esta planta.